domingo, 8 de noviembre de 2009

Ensayo del Tercer Nivel de Competencias




MAESTRÍA EN COMUNICACIÓN Y TECNOLOGÍAS EDUCATIVAS

Enrique Lemus Muñoz Ledo
Tutor: Lorena Guadalupe Páez Aguirre
Grupo: 1
Sede: ILCE Puente




HABLEMOS EL MISMO LENGUAJE:

EL IMPACTO DE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN
Y LA COMUNICACIÓN EN EL AULA








HABLEMOS EL MISMO LENGUAJE:
EL IMPACTO DE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN
Y LA COMUNICACIÓN EN EL AULA








Resumen



En este ensayo se aborda la problemática de la integración de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en proceso educativo, en el marco de la sociedad de la información, partiendo de la necesidad de que en el espacio áulico se hable el mismo lenguaje, se entiendan los códigos y sistemas simbólicos de estas tecnologías y se aprovechen sus potencialidades para la construcción de aprendizaje significativo, mediante la implantación de un nuevo paradigma y el desarrollo de nuevas propuestas pedagógicas que las incorporen al aula de manera más efectiva.




Introducción



Este ensayo parte de la hipótesis de que las nuevas tecnologías de la información y la comunicación como producto de la sociedad de la información que se ha desarrollado en el marco del proceso de globalización económica del mundo, tienen un gran potencial para fortalecer la educación y con ello dotar a las personas con las competencias y recursos necesarios para generar aprendizaje significativo y construir conocimiento que les permita contribuir a abatir los rezagos de nuestra población y fortalecer el desarrollo comunitario. Sin embargo, se reconoce que es necesario cambiar el paradigma educativo incorporando las TIC desde una perspectiva en la que se compartan lenguajes, códigos y sistemas simbólicos y se modifiquen los roles de profesores y estudiantes, centrando el proceso de enseñanza-aprendizaje en éstos últimos. Para lograr transformar el paradigma, se recogen y proponen algunos elementos para un nuevo modelo pedagógico que desarrolle las competencias necesarias en esta sociedad de la información, incorporación a la currícula la educación en y para los medios.




Sociedad de la información y nuevas tecnologías de la información y la comunicación.



Globalización o mundialización.



El proceso de globalización económica o globalización de los mercados, ha tenido un impacto muy profundo en cómo vivimos, interpretamos la realidad y nos relacionamos los seres humanos en la actualidad. Desafortunada y paradójicamente, este proceso a la vez que tendría las posibilidades de resolver la pobreza y el rezago en el que vive más de un tercio de la población mundial, contribuye a profundizar las desigualdades.


Es en este contexto donde se ha venido desarrollando una nueva revolución de la humanidad: la sociedad de la información. Este fenómeno ha sido impulsado por el vertiginoso desarrollo de la tecnología y, particularmente, de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.


Desde mi punto de vista, el surgimiento y desarrollo de la sociedad de la información tiene un impacto positivo que podría conllevar un nuevo paradigma de gran impacto para el desarrollo: la sociedad del conocimiento y la mundialización. Pero ¿qué no estamos hablando de lo mismo? Desde luego que no, el proceso de globalización económica o de los mercados fue un proceso que resultó del acelerado crecimiento de las empresas trasnacionales en las primeras décadas de la postguerra que requería liberar e interconectar los mercados y la sociedad de la información fue producto de las necesidades de información rápida y oportuna que permitiera un mejor manejo de sus operaciones así como una mayor penetración en los mercados (Roldán, Marta. 2000. pp. 30 y sig.). Debajo de ello subyacen el desarrollo paulatino de la sociedad del conocimiento que permitiría que cualquier persona en cualquier parte del mundo tenga las capacidades y recursos necesarios para generar aprendizaje significativo y construir conocimiento, así como el proceso de mundialización, que implica, fundamentalmente que cada persona en el planeta tenga las oportunidades efectivas que le permitan vivir dignamente.


Cuáles y qué son las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.



Como ya decíamos anteriormente, en las últimas décadas, la tecnología ha avanzado vertiginosamente, siendo este avance en los últimos cincuenta años mayor que en varios milenios. En este auge tecnológico se desarrollan lo que llamamos "tecnologías de la información y la comunicación". Pero ¿a qué nos referimos cuando hablamos de estas tecnologías y cuáles son?


Pues bien, Tomás Miklos et al (2008, p. 20) que cita a Alain, concibe las TIC como "instrumentos comunicativo-informacionales polimorfos que registran, conservan, transmiten contenidos; y que se les define como 'sistemas tecnológicos integrados e interconectados en una red mundial, mediante los cuales se recibe, se transforma y se transmite información'"


Habiendo definido a que nos referimos cuando hablamos de TIC, ahora habremos de clasificar aquellos "instrumentos" a los que nos referimos. No obstante que este término se ha hecho de uso común, así como sus siglas TIC, la mayoría de los autores enuncian algunos de ellos (Martínez Sánchez, 2007; Miklos et al, 2008; Casamayor et al, 2008; Barberá, 2008), lo que nos deja abierta toda posibilidad de interpretar los alcances de cualquier clasificación, pero por lo general se refieren a los siguiente: por el lado de los recursos físicos, la televisión, el radio, la computadora, teléfono, dispositivos de asistente digital personal (PDA) y por el lado de los recursos virtuales, el software con el que se almacena y procesa la información así como las interfaces de comunicación entre estos recursos y el usuario o entre estos, los mensajes mismos en sus diversos formatos, programas televisivos o de radio, los recursos en la Internet como el correo electrónico, el chat, las wikis, los blogs, los foros y las comunidades virtuales.


El proceso de enseñanza-aprendizaje como fenómeno de comunicación.



El proceso educativo, fenómeno fundamentalmente comunicativo.



De acuerdo con lo que señala Francisco Martínez (2007. p. 21), "los procesos de enseñanza son, en primer lugar, proceso de comunicación y en segundo lugar intencionados. Se trata de acciones comunicativas cuya intencionalidad es hacer crecer el repertorio de conocimientos, actitudes y aptitudes de que dispone el receptor".


El fenómeno comunicativo tiene tres componentes: el emisor, el mensaje y el receptor. Luego entonces, en el modelo educativo tradicional de nuestro país, en el proceso de enseñanza-aprendizaje intervienen tres factores fundamentalmente: el emisor del mensaje, rol que asume principalmente el docente; el receptor, es decir, el discente que recibe los contenidos; y el mensaje, es decir, los contenidos o información. De manera esquemática, este es el modelo mediante el cual se transmite y genera el conocimiento en las aulas en el sistema educativo mexicano.


La formación de significados.



Por otro lado, desde la perspectiva cognitiva, de acuerdo con J. Bruner, citado por Joaquín García y Gloria María Álvarez (2008, pp. 6-10), existen dos modalidades en la creación de significados de la actividad mental: paradigmática y argumental. Advierten los autores citados que ambas modalidades son irreductibles y que la una no subordina a la otra, sino que son necesariamente complementarias para que las personas conozcan e interpreten la realidad que les rodea.


La modalidad paradigmática o lógico-científica, está relacionada con la mente racional y es a través de la cual que


"…se delimitan los objetos del campo de estudio, se estipulan las definiciones, se acoplan los procedimientos de análisis y se calibra el grado de validez de las predicciones de lo que en el marco cultural se aprecia como paradigmáticamente, 'conocimiento' (el conocimiento científico) o lo que se estipula como la aplicación práctica de la racionalidad (la tecnología): los modos con los que la mente opera con la información de manera verificable, corroborable" (García, Joaquín y Álvarez, Gloria María. 2008. p. 7)



Por otro lado, para Bruner, la modalidad narrativa de las aplicaciones de las funciones mentales


"'se ocupa de las intenciones y acciones humanas y de las vicisitudes y consecuencias que marcan su transcurso'. Añade el mismo autor que el relato se construye desde un panorama de actuaciones de los individuos y desde el panorama de las conciencias de los actores, desde 'lo que saben, piensan, sienten, o dejan de saber, pensar o sentir'" (García, Joaquín y Álvarez, Gloria María. 2008. p. 7)



Como se puede notar, evidentemente, la modalidad paradigmática constituye uno de los fundamentos del sistema educativo que pretende fomentar su desarrollo para el ejercicio profesional de los educandos. No obstante, la modalidad narrativa comienza a adquirir cada día más importancia, sobre todo cuando la mediación de la tecnología y la centralidad del proceso de generación de conocimiento se va trasladando al estudiante, en muchas ocasiones fuera del ámbito escolar, al tiempo que es cada vez más importante el desarrollo de las competencias de pensamiento crítico, como herramienta imprescindible para interpretar la realidad y contribuir a la transformación del entorno social en que cada persona se desenvuelve.




Influencia de las tecnologías de la información y la comunicación en la construcción del conocimiento.



En el marco de la sociedad de la información, la multiplicidad de recursos a través de los cuales las personas tienen acceso a información y se interrelacionan va en aumento, con lo que la formación de conocimiento se va trasladando cada vez más de las aulas a espacios informales de aprendizaje. Es decir, el proceso de aprendizaje esta cada vez más mediado por la tecnología y centrado en el discente, lo que tienen efectos muy importantes en la efectividad de la metodología tradicional de enseñanza-aprendizaje de nuestro modelo educativo.


Revolución de la información.



Decíamos anteriormente que globalización económica ha conllevado un proceso de que implica la transformación diametral de las relaciones humanas al ampliarse el ámbito de actuación de la persona mucho más allá de su comunidad natural inmediata, pudiendo comunicarse con personas al otro lado del mundo en tiempo real o de manera asincrónica, y teniendo acceso a una avalancha de información sobre cualquier tema que se le ocurra. De igual forma, la globalización de los mercados, permite que en cualquier parte del mundo prácticamente se puedan comercializar los instrumentos tecnológicos que constituyen la base de la sociedad de la información, además, cada vez a precios más accesibles.


Esto no es una apología de la economía del mercado, en tanto que no se han resuelto las grandes asimetrías regionales entre el centro y la periferia del desarrollo y la brecha digital parece contribuir a fortalecer la brecha entre ricos y pobres. De acuerdo con lo que señala Tomás Miklos et al (2008), existe una correlación entre el PIB per capita con el acceso a Internet, de tal manera que en Suecia el 75% de la población tiene acceso, mientras que en América Latina sólo 115 de cada 1000 habitantes lo tiene.


No obstante, debemos reconocer que el desarrollo de las TIC tiene un gran potencial para ampliar el acceso y fortalecer la educación. Gracias a ello, de acuerdo con un reporte de la Organización de Estados Americanos (s/f) sobre las TIC y su uso en la educación, el 37.1% de escuelas, cuentan con computadora y el número de computadoras por escuela es de 15.8 unidades en promedio en los países de Iberoamérica.


Particularmente, en México, las TIC han dado muestras de su potencial en apoyo de la educación a través de la Telesecundaria que ha sido un programa que ha demostrado una gran efectividad para ampliar la cobertura de la educación secundaria a zonas marginadas o de difícil acceso, llegando a tener más de 30 mil receptores en el país. De igual forma, de acuerdo con datos de la Secretaría de Educación Pública (2007), el 66% de las escuelas de educación primaria censadas (el 94.5% de las escuelas existentes), cuenta con al menos una computadora; el 28.4% cuenta con conexión a Internet; de las escuelas que cuentan con computadora, el promedio es de 8 computadoras por escuela, de las cuales 3 tienen conexión a Internet. De igual forma, el 17.1% cuenta con videoteca y el 5.3% cuenta con Red Edusat. Respecto de la secundaria se presentan cifras similares y en los siguientes niveles hay algunas variaciones principalmente en cuanto a una mayor presencia de las computadoras.


A pesar de estas cifras que parecen alentadoras, en América Latina y, por tanto en nuestro país, la incorporación de las tecnologías de la información y la comunicación al aula se encuentra en la etapa tecnológica, es decir, que son preponderantes las razones que las reducen a meras herramientas con mayor o menor aplicación didáctica o cuando mucho insistiendo en la alfabetización digital (Gutiérrez, Alfonso. 2007).


Revolución del lenguaje en la sociedad de la información.



Por otro lado, más allá de lo que los instrumentos tecnológicos significan, la sociedad de la información y el gran desarrollo de las TIC plantean una revolución lingüística, tal como ocurrió con la invención de la escritura y la imprenta, por lo tanto, los modelos pedagógicos deben actualizarse a esta nueva realidad, considerando fundamentalmente la dimensión comunicativa del proceso de enseñanza-aprendizaje.


Ante esta revolución lingüística es preciso reconfigurarnos como sujetos de comunicación, lo que necesariamente, implica la comprensión de los nuevos lenguajes, sistemas simbólicos y modificaciones al proceso cognitivo que conlleva la mediación de las tecnologías en el acceso a información, la comunicación y la formación de conocimiento, dentro o fuera del espacio áulico. Decía Papert (1995) en su célebre metáfora que si trajéramos a través del tiempo a un grupo de cirujanos y a un grupo de maestros y los internáramos a un quirófano y a una aula de clases, respectivamente, los cirujanos estarían completamente desconcertados al no conocer prácticamente todo el instrumental ni el papel del cirujano, mientras que los profesores prácticamente podrían continuar con la clase, a pesar de que no se sentirían familiarizados quizás con algunos objetos.


Podríamos ir más allá de esta metáfora e imaginarnos que ese salto de cien años se da en tiempo real con sólo cruzar una puerta cuando los alumnos entran al salón de clase y todo en él está tan lejano de los instrumentos de información y comunicación y los que le rodean en su vida cotidiana fuera del aula, que difícilmente pueden lograr aprendizaje significativo para sus vidas ahí; más aún, el lenguaje que se utiliza no tiene nada que ver con los 140 caracteres de twitter o los emoticonos de los chats y otras comunidades virtuales en las que actúa, por lo que parece siempre que no hay punto de encuentro en la comunicación del profesor con los estudiantes.


Elementos para un modelo pedagógico que incorpore las TIC al proceso de enseñanza-aprendizaje.



En este nuevo escenario, la mayoría de los estudiantes matriculados en el sistema educativo son lo que se conoce como "nativos digitales", término acuñado por Mark Prensky, citado por Gregorio Casamayor et al (2008. p. 211), que se caracterizan porque producen y consumen de manera habitual contenidos audiovisuales para la red social a partir de las tecnologías digitales y utilizan varios elementos audiovisuales de manera simultánea, dominando códigos y lenguajes diversos y propios de cada medio en el que convergen para comunicarse y obtener información.


En la otra cara de la moneda, los docentes, que la mayoría son lo que se conoce como "migrantes digitales" y que se caracterizan porque han sido incorporados a la Internet de manera tardía a través de un proceso de alfabetización tecnológica y que, por consecuencia son internautas pasivos, es decir, lectores y visualizadores de contenidos (Casamayor, Gregorio et al. 2008. p. 211)


Como consecuencia de lo anterior, es preciso que para la incorporación efectiva de las TIC en el proceso de enseñanza-aprendizaje se tienen que desarrollar competencias para el uso de las TIC así como competencias comunicacionales y mediacionales tanto en docentes como en los alumnos, pensando en que, por principio, la educación en y para los medios debe integrarse a la currícula regular de las instituciones educativas, con alcance y profundidad distintas de acuerdo con el nivel educativo.


Asimismo, el nuevo paradigma de la educación en la sociedad de la información, implica necesariamente que los roles de docente y alumnos se modifiquen considerando la mediación de las TIC en la generación de aprendizaje significativo.


Desarrollo de las competencias en la sociedad de la información.



Para Yolanda Argudin (2005. pp. 22 y 23), la sociedad de la información exige la construcción de 17 competencias básicas que van desde la capacidad e aprender a aprender, de aplicar los conocimientos en la práctica, capacidad de análisis y síntesis, habilidades interpersonales, creatividad, competencias comunicacionales (oral y escrita), desarrollo de pensamiento crítico, competencias tecnológicas, valores, dominio de diversos lenguajes, apreciación de la diversidad cultural y habilidades de investigación. Esto implica que tanto los estudiantes como los docentes desarrollen estas competencias indispensables para que las personas transiten con mayores posibilidades de éxito en este nuevo contexto.


Por otro lado, para la UNESCO (2008. p. 6 y sig.), que considera que el mejoramiento de la educación tiene un impacto insustituible en el crecimiento económico sostenible, la reducción de la pobreza y el mejoramiento de la calidad de vida de las personas, los sistemas educativos deberán integrar el desarrollo de competencias para docentes orientándose en tres enfoques: incrementar la comprensión tecnológica de las personas mediante la integración de competencias en TIC en los planes de estudio (enfoque de nociones básicas de TIC); acrecentar la capacidad de las personas para utilizar los conocimientos con el fin de agregar valor a la sociedad y a la economía, aplicando dichos conocimientos para resolver problemas complejos y reales (enfoque de profundización del conocimiento); y aumentar la capacidad de las personas para innovar y producir nuevo conocimiento (enfoque de generación de conocimiento).


Conclusión.



Creo que las propuestas de Argudyn y de la UNESCO tienen sin lugar a duda muy sólidas bases, pero creo que también es muy importante señalar que esto no puede ser posible si no empezamos por modificar los modelos tradicionales con los que actualmente tratamos de enseñar a los jóvenes en las aulas. Ha ocurrido que estos nuevos enfoques se "montan" sobre las viejas pedagogías y por lo tanto, la integración de las TIC en el proceso de enseñanza-aprendizaje es incompleta y no se explotan sus potencialidades. Mientras los docentes sigan enseñando "cómo toda la vida" y los estudiantes no estén motivados para aprender cosas y lenguajes tan ajenos a su realidad inmediata, por más computadoras y recursos que tengamos en las escuelas, el desarrollo de esas competencias seguirá siendo una propuesta y los jóvenes seguirán sin construir aprendizajes significativos en el aula y se perderán en la marea de información y recursos que las nuevas tecnologías de la información y la comunicación traen consigo.


Estoy seguro que si los docentes logran comprender los recursos tecnológicos que determinan la apreciación, conocimiento e interpretación de la realidad en esta sociedad de la información y desarrollen pedagogías adecuadas para su incorporación en el aula, entonces sí vamos a hablar el mismo lenguaje que los jóvenes, nativos digitales y, en consecuencia, tendremos más posibilidades de tener un desarrollo personal y profesional que permitan contribuir a abatir el rezago de nuestra población.




Referencias



Argudin, Yolanda (2005). Educación basada en competencias. Nociones y antecedentes. Editorial Trillas. México. (pp. 22 y 23).


Barberá, Elena (2008). Aprender e-learning. Paidós. España.


Casamayor, Gregorio et al (2008). La formación on-line. Una Mirada integral sobre el e-learning, b-learning...Graó. España. (p. 211).


Espíndola Castro, José Luís (1996). Fundamentos de la Cognición. Addison Wesley Longman de México. Estado de México, (pp. 89-123, 161-185).



García Carrasco, Joaquín y Álvarez Cadavid, Gloria María (2008). Reconfiguración como sujetos de comunicación: implicaciones para los ambientes virtuales con fines educativos. Revista de Universidad y Sociedad del Conocimiento. Vol. 5, No. 2. Pp.5-15. Recuperado el 27 de septiembre de 2009 en http://www.cysp.com.mx/Ima/Amiti/Documentos%20Descargables/ict_oct_06.pdf

http://rusc.uoc.edu/ojs/index.php/rusc/article/view/333




Gutiérrez Marín, Alfonso (2007). Integración curricular de las TIC y educación para los medios en la sociedad del conocimiento. Revista Iberoamericana de Educación. No

. 45, Septiembre/Diciembre de 2007. pp.141-156. Recuperado el 23 de octubre de 2009 en

http://www.rieoei.org/rie45a06.htm


Martínez Sánchez, Francisco (2007). La integración escolar de las nuevas tecnologías. En Cabero, Julio et al, Nuevas Tecnologías Aplicadas a la Educación (pp. 21-40). Madrid. Mc Graw Hill.


Mikos, Tomás et al (2008). El futuro de la educación a distancia y del e-learning en América Latina. Una visión prospectiva. ILCE. México. (pp. 20, 356-360).


Organización de Estados Americanos.(s/f) Metas educativas 2021 . Recuperado el 7 de octubre de 2009, de: http://www.oei.es/metas2021/foroticsyeducacion.htm


Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (2006). ICT Diffusion to Business: Peer Review Country Report Mexico. Recuperado el 9 de octubre de 2009 en


Papert, Seymour.
(1995).
La máquina de los niños. Replantearse la educación en la era de los ordenadores. Barcelona: Paidós.


Roldan, Martha (2000). ¿Globalización o mundialización? Teoría y práctica de procesos productivos y asimetrías de género. Eudeba y Universidad de Buenos Aires. Argentina. (pp. 30 y sig.)


Secretaría de Educación Pública (2007). Sistema Educativo de los Estados Unidos Mexicanos, principales cifras, ciclo escolar 2007-2008. México. Recuperado el 11 de octubre de 2009 en http://www.dgpp.sep.gob.mx/Estadi/Principales_cifras_2007_2008?.pdf


Unesco. (2008) Estándares de competencia en TIC para docentes. Consultado el 16 de septiembre de 2009 en: http://www.eduteka.org/pdfdir/UNESCOEstandaresDocentes.pdf







FORMATOS




Formato de análisis y autoevaluación del ensayo



SECCIÓN A

1) Análisis del ensayo: Hablemos el mismo lenguaje: El impacto de las tecnologías de la información y la comunicación en el aula
(Escriba por favor el título de su ensayo)
Enrique Lemus Muñoz Ledo

(Escriba el nombre del autor(a))


¿Cuál es la posición del autor(a) (el estudiante), su versión de las cosas y qué quiere expresar a través del texto?



Este ensayo parte de la hipótesis de que las nuevas tecnologías de la información y la comunicación como producto de la sociedad de la información que se ha desarrollado en el marco del proceso de globalización económica del mundo, tienen un gran potencial para fortalecer la educación y con ello dotar a las personas con las competencias y recursos necesarios para generar aprendizaje significativo y construir conocimiento que les permita contribuir a abatir los rezagos de nuestra población y fortalecer el desarrollo comunitario. Sin embargo, se reconoce que es necesario cambiar el paradigma educativo incorporando las TIC desde una perspectiva en la que se compartan lenguajes, códigos y sistemas simbólicos y se modifiquen los roles de profesores y estudiantes, centrando el proceso de enseñanza-aprendizaje en éstos últimos. Para lograr transformar el paradigma, se recogen y proponen algunos elementos para un nuevo modelo pedagógico que desarrolle las competencias necesarias en esta sociedad de la información, incorporación a la currícula la educación en y para los medios.

SECCIÓN B

2) Autoevaluación del ensayo:


De acuerdo con mi criterio, considero que mi ensayo debe obtener, en una escala de 1 al 10 (1 es lo más bajo y 10 lo más alto): __________________8___________
(Anote el número correspondiente)




Formato autoevaluación de foros



SECCIÓN A


  1. Reflexión de su participación en los foros:


    Enrique Lemus Muñoz Ledo
    (Escriba el nombre del autor(a))


Realice una breve reflexión de las actitudes mentales de pensamiento crítico que puede observar en su participación en los foros



Las actividades de los foros son de las que más me han gustado porque nos ha permitido fortalecer diversas actitudes mentales del pensamiento crítico como la humildad y la honestidad intelectual, primero al atreverse a expresar en público y por escrito tus propios razonamientos, así como aceptar los argumentos de los demás y respetarlos; la empatía intelectual y la integridad intelectual, al encontrar afinidades o complementariedad de los argumentos de unos y otros para lograr un propósito intelectual común; la perseverancia intelectual y la confianza en la razón para armarse con los argumentos, datos e información necesaria para tratar de convencer a los demás de tus puntos de vista; y por último, el sentido de justicia intelectual para reconocer y aceptar el resultado de la deliberación colectiva.

SECCIÓN B

2) Autoevaluación del wiki:



De acuerdo con mi criterio, considero que en mi participación en los foros debo obtener, en la escala de 1 al 10 (1 es lo más bajo y 10 lo más alto): ___________8__________________
(Anote el número correspondiente)




Formato autoevaluación y coevaluación de Red de Apoyo



Exprese cuáles fueron las habilidades o destrezas en las que apoyó a sus compañe@s de su Red de Apoyo y manifieste cuáles fueron las habilidades o destrezas en las que fue apoyado por ell@s.


Apoyé a mis compañeros de mi Red de Apoyo para:



  • Buscar y compartir datos relevantes que pudieran enriquecer el trabajo de los demás.


  • Referencias bibliográficas o de internet que iba recopilando en las diversas búsquedas que hicimos.


  • Apoyar con comentarios y opiniones para delimitar con mayor precisión sus temas de ensayo.


  • Promover el uso de recursos tecnológicos para el desarrollo de actividades del curso, aunque no fuera estipulado así, fortaleciéndose con ello el trabajo colaborativo y el desarrollo de competencias de uso de la tecnología.


  • Colaborar en las actividades colaborativas.


  • Responder consultas de uso de tecnologías.


  • Ayudar a clarificar instrucciones para el desarrollo de las diversas actividades.





Mis compañeros de la Red de Apoyo me ayudaron a:

  1. (Adriana Laguna) me ayudó a: entender mejor los requerimientos de algunos trabajos, así como comprender mejor los conceptos y actividades en las telesesiones.


  2. (Mercedes Miranda) me ayudó a: desarrollar mejor las actividades colaborativas e individuales.


  3. (Blanca Arthur) me ayudó a: delimitar y enfocar mejor mi ensayo y trabajar en equipo para el desarrollo de diversas actividades.


  4. (Rodrigo Alvarez) me ayudó a: usar mejor las tecnologías para las actividades que se requerían. Asimismo, contribuía a redactar y enviar los trabajos colaborativos al resto del equipo.